lunes, junio 20
viernes, junio 17
2. 2. 3. Jerusalén: el centro de donde parte la acción misionera por Carlos Mesters
2. 2. 3. Jerusalén: el centro de donde parte la acción misionera
Jerusalén ocupa un lugar central en los dos libros de Lucas: Evangelio y Hechos. Es en Jerusalén donde empieza la historia de Jesús (Lc 1,8-9); hacia allá converge (Lc 9,31.51-53; 13,22-23; 17,11) y es allí donde termina (Lc 24,33-52). Es allá donde comienza también la historia de la Iglesia (Hch 1,4.6-26) y desde allí debe partir toda acción misionera (Lc 24,47; Hch 1,8). A su vez cada uno de los viajes parte de Jerusalén y termina allí (Hch 12,25; 15,2; 18,22; 21,15). Así, el hilo del recorrido de los tres viajes misioneros de Pablo está colgado en los postes de cuatro visitas a Jerusalén. El objetivo de la acción misionera es llegar hasta el “fin del mundo” (Hch 1,8), es decir, toda la humanidad. El fin del mundo, en este caso, era Roma. Allí termina el libro, con Pablo en la prisión, hablando “con valor y sin impedimento” (Hch 28,31). El esquema gráfico de los tres viajes deja transparentar esta otra lección de Lucas.
Todo empieza en Jerusalén (Hch 1,4-8.12; 2,5)
Jerusalén: Pablo y Bernabé suben para llevar ayuda (Hch 11,27-30; 12,25)
Primer viaje [Inicio (Hch 13,3)]
El punto de partida es ‘Antioquía’ en Siria (13,1-3).
Desde allí salen en barco hasta ‘Salamina’, en la isla de ‘Chipre’ (13,4-5).
Atraviesan la isla y paran en Pafos: conflicto con el mago (13,6-12).
Suben hasta ‘Antioquía’ (Pisidia): Discurso, conflicto (13,13-52).
Siguen para ‘Iconio’ en Licaonia: conflicto con los judíos (14,1-5).
Llegan a ‘Listra’: conflicto con paganos y judíos (14,6-20).
Llegan hasta ‘Derbe’ que marca el lugar del retorno (14,20).
A la vuelta pasan por ‘Derbe’, ‘Listra’, ‘Iconio’ y “Antioquía’ (14.21-23).
Hacen parada en ‘Perge’ y, pasan por ‘Atalía’ (14,24-25).
Vuelven a ‘Antioquía’ de Siria (14,26-28).
Primer viaje [Fin (Hch 14,28)].
Jerusalén: Pablo y Bernabé suben para resolver un problema (Hch 15,2.30)
Segundo viaje [Inicio (Hch 15,36)]
El punto de partida es ‘Antioquía’: pelea con Bernabé (15,36-40).
Recorren ‘Siria’ y ‘Cilicia’, confirmando a las comunidades (15,41).
Pasan por ‘Derbe’ y “Listra’ y llevan con ellos a Timoteo (16,1-15).
Entran en ‘Frigia’; no pueden ir hasta Asia; pasan por ‘Galacia’ (16,6).
El Espíritu les impide ir hasta Bitinia y siguen para ‘Misia’ y ‘Tróade’ (16,7-8).
Un sueño les lleva hasta ‘Filipos’ en Macedonia: conflicto (17,1-9).
Expulsados de allí, siguen a ‘Tesalónica’: conflicto (17,1-9).
Expulsados de allí, siguen a ‘Berea’: conflicto (17,15-34).
Expulsado, va a ‘Atenas’: Discurso, conflicto (17,15-34).
Desde allí, viaja a ‘Corinto’, donde permanece diez y ocho meses (18,1-8).
De Corinto, embarca hacia ‘Efeso’ en donde promete que volverá (18,19-21).
Embarca hacia ‘Cesarea’ y ‘Jerusalén’ (“La Iglesia”) (18-22).
Vuelta a ‘Antioquía’ en Siria (Hch 18,22).
Segundo viaje [Fin (Hch 18,22)].
Jerusalén: Pablo “subió para saludar a la Iglesia” (Hch 18,22)
Tercer viaje [Inicio (Hch 18,23)].
El punto de partida es de nuevo ‘Antioquía’ (18-23).
Recorre ‘Galacia’ y ‘Frigia’, confirmando a las comunidades (18.23).
Sigue directo hasta ‘Efeso, en donde permanece tres años: conflicto (19,1-40).
Expulsado de allí, continúa hacia ‘Macedonia’ (20,1).
Baja hasta ‘Corinto’ en Grecia, en donde se queda tres meses (20,2-3).
Amenazado de muerte, vuelve a ‘Macedonia’ hasta ‘Tróade’ (20,3-12).
Viajan de ‘Tróade’ a ‘Mileto’ en dos grupos (20,13-16).
En ‘Mileto’ Discurso a los coordinadores de Efeso (20,5-38).
Sigue en barco hasta ‘Tiro’, en Siria: Visita a la comunidad (21,1-6).
Continúa hasta ‘Tolemaida’ y ‘Cesarea’, y visita a las comunidades (21,7-14).
Sube hasta ‘Jerusalén’, en donde le apresan en la plaza del templo (21-15,36).
Tercer viaje [Fin (Hch 21,17)].
Jerusalén: Pablo sube para entregar la colecta (Hch 21,17-36)
Pablo sale de Jerusalén para llevar la Buena Nueva hasta Roma
Pasando por Roma, “el fin del mundo” (1,8; 28,14), la Buena Nueva llegó a América.
miércoles, junio 15
lunes, junio 13
Vitaminas sanadoras Para fortalecer tu vida cristiana: lo mejor la oración
viernes, junio 10
2. 2. La geografía de los viajes por Carlos Mesters
2. 2. La geografía de los viajes
2. 2. 1. ¿Las cartas o los Hechos?
En varios lugares existen contradicciones entre los Hechos y las Cartas. Por ejemplo, en las cartas, Pablo dice que, después de su conversión, viajó a Arabia (Gál 1,7); en los Hechos, Lucas dice que fue a Jerusalén (Hch 9,26). Los estudiosos prefieren dar la razón a Pablo, pues Lucas no siempre está interesado en darnos el proceso exacto de los acontecimientos. Al describir los viajes de Pablo en los Hechos, piensa más en sus lectores de las sufridas comunidades de los años 80, que en el propio Pablo de los años 50. Lucas describe los hechos, de tal modo que sus lectores puedan captar la ‘lección de la historia’. Para nosotros, hoy, no siempre es fácil discernir lo que es hecho y lo que es lección de la historia. Pero es bueno no preocuparse demasiado en estas cuestiones. No son tan importantes; mucho más importantes es que tengamos la misma preocupación que Lucas tuvo, a saber: la Palabra de Dios debe poder encontrar su camino y alcanzar su objetivo hoy, en la vida de nuestros comunidades.
2. 2. 2. La profecía de Pentecostés: la misión debe llegar a todos los pueblos
Cuando mires y compruebes en el mapa las varias regiones y pueblos por los que pasó Pablo, procura verificar lo siguiente: el día de Pentecostés, Lucas enumera los pueblos presentes en Jerusalén (cf. Hch 2,8-11). A lo largo de los viajes de Pablo, nos muestra cómo éstos y otros pueblos van acogiendo el Evangelio. Así se realiza la profecía de Pentecostés. La historia de la humanidad desintegrada en la construcción de la torre de Babel, por la confusión de lenguas (Gen 11,5-9), se va rehaciendo a través del trabajo misionero de Pablo y del pueblo de las comunidades. Esta es una de las muchas lecciones que Lucas saca de los Hechos y la presenta a sus lectores.
martes, junio 7
San Pablo: Catequista y Comunicador
Fue escrito para celebrar el Año Paulino y está dirigido a jóvenes, niños y adultos para que puedan ahondar en su espiritualidad y conozcan más sobre el apósto de los gentiles y su magnánima obra, ayudar a comprometerse con la evangelización y apasionarse como él por Cristo.
http://books.google.com/books?id=6-AaUp91O40C&printsec=frontcover&source=gbs_ge_summary_r&cad=0#v=onepage&q&f=false
jueves, junio 2
¿Por qué Alberione eligió a san Pablo?
«Toda la vida de la Familia Paulina ha venido de la Eucaristía; pero fue transmitida por san Pablo. …El Instituto fue inspirado por él. Él es el padre, la luz, el protector, el maestro, todo. …La Familia Paulina, compuesta de muchos miembros, debe ser san Pablo vivo hoy, en un cuerpo social.
…No hemos elegido nosotros a san Pablo: ha sido él quien nos ha elegido y llamado. Quiere que hagamos lo que haría él si viviera hoy» (Vademecum, n. 651). La unidad de la Familia Paulina se ha pensado y elaborado en orden al proyecto integral de nueva evangelización, fundado sobre san Pablo y sobre la comunicación para el Evangelio. Por tanto, conocer a san Pablo, profundizarlo, lleva a conocer y profundizar el carisma paulino en su espiritualidad y en sus apostolados, así como la unidad de espiritualidad y la complementariedad de los apostolados de la Familia Paulina se aventajan con la asimilación integral del pensamiento y obra de san Pablo.
Encuentros 2 n.8 Vitaminas sanadoras La conversión cristiana fuente de gozo y de esperanza
miércoles, junio 1
2. 1. La situación del pueblo en el Imperio Romano y en Palestina por Carlos Mesters
2. 1. La situación del pueblo en el Imperio Romano y en Palestina
2. 1. 1. En el Imperio Romano
Los viajes de Pablo transcurrieron entre los años 46 y 58. Al inicio, en el 46, el emperador de Roma era Claudio (41-54). Al final, en el 58, el emperador era Nerón (54-67). Durante todos estos años, el gobierno central del Imperio continuaba con su esfuerzo de concentrar el poder y la riqueza en Roma. Este proceso ya venía ocurriendo desde el siglo anterior, cuando se dio el paso de República a Imperio. Por ese motivo, el Imperio procuraba mantener la llamada “PAX ROMANA”. La Paz Romana favorecía el comercio internacional, hacia posible el cobro tranquilo de los impuestos y tributos y, por consiguiente, garantizaba la concentración de la riqueza y del poder de Roma. Resultado: esclavitud creciente en las periferias y exceso de lujo en el centro, en Roma. Por un lado, sufrimiento y revoluciones; por otro, insensibilidad, alienación y relajación de las costumbres (Rom 1,18-32). Pablo define bien la situación general cuando dice: “Los hombres mantienen la verdad prisionera de la injusticia” (Rom 1,18). Junto a esto, el racionalismo de la cultura griega había vaciado la vida y provocado una gran búsqueda de misticismo. Para mantener la unidad y garantizar mejor la “Pax Romana” el Imperio empezaba a introducir, poco a poco, el culto obligatorio a su Emperador.
2. 1. 2. En Palestina
La situación estaba cada vez más confusa y más conflictiva. Los tributos, los impuestos y las tasas continuaban quitando casi la mitad de la producción a los agricultores. La represión romana, cada vez más violenta, intentaba reprimir las rebeliones cada vez más frecuentes y más desesperadas. Poco a poco se organizaba la rebelión contra el Imperio Romano. Esta situación extrema de explotación y de represión se agravaba por la opresión estúpida de los procuradores romanos, sin ninguna sensibilidad hacia la cultura y la religión del pueblo palestino. El movimiento popular estaba entrando en una fase muy confusa de radicalización irreversible. Continuaban la opresión y los movimientos mesiánicos anteriores; crecía el número de los profetas populares; el movimiento de los Zelotes empezaba a tener una organización más consistente y se fortalecía el grupo radical de los sicarios. Los fariseos tomaban una cierta distancia. Los cristianos no entraban en este tipo de movimientos.